Llevo un tiempo reflexionando sobre el tema y me he dado cuenta de que los efectos de la marihuana me han ayudado a ser una persona mucho mejor.
Ahora dirás: “Mi compa, el que no puede dejarla…”
Yo suelo consumir por las tardes y por las noches. Por la mañana, cuando no consumo, soy una “excelente persona”. No me malinterpretéis, pero es cierto que, ante la adversidad o situaciones negativas, tengo un carácter más hostil y me cuesta procesarlas o afrontarlas con positividad. No es que esté cabreado o irascible por no haber consumido y que me coman los nervios, al contrario, simplemente ser así es lo más normal.
Cuando he estado periodos sin consumir, he sido así en mi día a día. Incluso recuerdo que antes de consumir, también era una persona simpática y agradable, pero a la que, si la tocabas un poco, respondía de malas formas.
Curiosamente, a partir de la tarde y en la noche, me convierto en una persona mucho más empática, amigable, simpática y cercana… y todo esto después de experimentar los efectos del cannabis.
Y algunos dirán: “Claro, porque vas colocado.”
Pero, ¿qué más da eso? La cuestión es que cuando la marihuana está en mi cuerpo, me convierto en una mejor persona. Puede que esto no sea el “mundo real” porque así no es la mayoría, pero recordemos que el mundo real ya de por sí es bastante cuestionable.
Al final, la vida es la perspectiva que cada uno tiene de ella: la visión que tenemos del mundo. Y si hay algo que me ayuda a tener una visión más alegre, más positiva y a disfrutar más de la vida, ¿por qué no utilizarlo?
“Tío, pero es que cuando vas colocado te vuelves un vago y no haces nada con tu vida.”
Eso serás tú, que eres un vago con o sin maría. Yo, por mi parte, estoy levantando un proyecto de creación de contenido en Dr. Whisk3rs y demuestro trabajo y constancia todos los días.
¿Y sabes qué? Consumo marihuana a día de hoy y he llegado mucho más lejos que algunas personas que no la consumen. Así que, ¿cuál es el problema entonces? ¿El cannabis? ¿O cada persona?
