¿Sabías que la parte del cannabis que nos pone “volados” tiene un efecto diferente si la consumimos de manera aislada o junto con la maría completa?
Te explico: la marihuana es simplemente una planta que contiene un componente químico concreto. Cuando este componente, conocido como tetrahidrocannabinol o THC, se adhiere a nuestro cerebro, nos genera el efecto psicoactivo que todos conocemos.
Lo curioso es que, cuando consumimos THC junto con la maría, nos “pega” y produce el efecto que todos conocemos. Pero cuando lo extraemos y lo consumimos de manera aislada, el efecto del THC que nos produce es completamente diferente.
Y dirás: ”¿cómo puede ser esto?”
Pues parece ser que, de manera muy curiosa (y que a día de hoy no entendemos al 100%), el THC se junta con unas sustancias que son las responsables del aroma y sabor de la maría, únicas en cada uno de los tipos de marihuana. Estas sustancias se llaman terpenos. Es más bien la sinergia del THC con todos estos terpenos la que modula y hace que el cannabis nos “pegue” de una forma u otra.
Así que el efecto que tanto nos gusta de la marihuana no es solo el resultado del THC, sino el efecto combinado con otras sustancias de la maría. Es por eso que cada una de las genéticas de cannabis nos “pegan” de manera distinta, aunque todas contengan el mismo componente.
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