La marihuana, más allá de su uso recreativo, ofrece una serie de beneficios que han sido estudiados científicamente.
En primer lugar, dormir mejor. Los cannabinoides no solo inducen al sueño, sino que también extienden el tiempo en el que se permanece en el sueño profundo. Esto ocurre durante las fases 3 y 4 del sueño, que son cuando el organismo se prepara físicamente para el siguiente día. Sin embargo, es cierto que los efectos de la marihuana pueden acortar ligeramente la fase REM, en la que soñamos, y también impacta en el cerebro, por lo que es importante tener precaución con este tema.
En segundo lugar, comer. Aunque no se sabe exactamente cómo funciona este efecto debido a la falta de estudios, parece ser que los beneficios del cannabis se deben a la interacción de la marihuana con los receptores CB1 en el cerebro, los cuales están involucrados en la regulación del apetito. Esto es especialmente útil en personas que han pasado por enfermedades graves, como el cáncer, o aquellos que han recibido quimioterapia y han perdido el apetito.
En tercer lugar, reducir las náuseas. El cannabis tiene un potente efecto antiemético que ayuda a reducir las náuseas y los vómitos. Sin embargo, fumar marihuana en exceso puede inducir efectos secundarios de la marihuana, como la conocida «pálida», que se caracteriza por sentir náuseas, mareos y una ligera sensación de desorientación. Con un consumo moderado, este beneficio es muy útil, sobre todo en pacientes sometidos a tratamientos como la quimioterapia.
Y, en cuarto lugar, se ha comprobado que el beneficio de la marihuana como anticonvulsivo es prometedor. Se ha demostrado que ayuda a reducir las convulsiones causadas por enfermedades como el Parkinson o la esclerosis múltiple.
Los efectos del cannabis en la salud son diversos; aunque algunos pueden ser muy beneficiosos, es importante conocerlos para evitar complicaciones.
Por mucho que lo repitan, en este blog de Dr. Whisk3rs te explico en detalle por qué la marihuana no es tan peligrosa como quieren hacernos creer.